Con la llega del calor, la jornada intensiva y las ansiadas vacaciones de verano, se cierne también una ya clásica encrucijada en las agencias y departamentos de comunicación: ¿debe detenerse la comunicación en verano?
No cabe la menor duda de que en los meses de julio y agosto la comunicación sufre un notable cambio de ritmo, pero esto no quiere decir que sea correcto detenerla durante la temporada estival. A diferencia de hace algunas décadas cuando verano era sinónimo de un gran parón corporativo, actualmente las empresas no paran en ningún momento del año su actividad, por lo que se abre la oportunidad de reforzar el posicionamiento de la compañía y mantenerla cercana a sus públicos de interés.
¿Error u oportunidad?
Hoy por hoy, nos encontramos frente a nuevos hábitos de consumo informativo, que desmienten la creencia más tradicional de que no es efectivo comunicar en verano. Aprovechar estos meses para hacer anuncios corporativos se traduce en sacar partido a la poca competencia que se presenta. No obstante, es necesario saber cómo comunicar para captar la atención de los medios y, por lo tanto, llegar a los públicos de interés.
En un periodo donde las redacciones están en un periodo de idas y venidas vacacionales de sus equipos, es necesario saber qué y cómo comunicar ya que no funciona la misma estrategia que el resto del año. Primero, debemos tener en cuenta que como gabinetes de comunicación nuestro trabajo es facilitar la labor de nuestros compañeros periodistas. Por ello, tenemos que apostar por notas de prensa más ligeras y visuales, que cuenten con infografías e incluso vídeos cortos. En este caso, las piezas extensas pueden esperar hasta septiembre.
No todo vale
Ante las vacaciones del personal en los medios, durante el verano muchas redacciones apuestan de los llamados contenidos de nevera, y este nombre no se debe precisamente al calor. Se refiere al uso de información atemporal y de interés que se va recolectando a lo largo del año y que se guarda para publicarlos en períodos con menor densidad informativa. Por ello es la época ideal para enviar notas de prensa con estadísticas, índices, tendencias, argumentos relacionados con la empresa, para así intentar entrar en dicha nevera y poner nuestro contenido en la mano de los periodistas.
Por otro lado, para acercarnos a nuestro público de interés y mantener el posicionamiento de nuestra marca, debemos dejar de lado la información con intención comercial y acompañar, a través de nuestro contenido, a los lectores en su descanso. Para esto, durante las vacaciones las empresas deben tomar un papel activo en el descanso de su público ofreciendo contenidos de fácil lectura y comprensión.
En resumen, la comunicación debe ser una actividad constante y sin descansos. Sin embargo, una estrategia de comunicación efectiva entiende de estaciones y debe ser capaz de adaptarse a las circunstancias del público. En unas pocas semanas el calor pasará, y poco a poco estaremos de vuelta a la rutina, por lo que haber mantenido el contacto con nuestros lectores acompañándolos en todo el proceso, nos permitirá mejorar la relación con los mismos a la vuelta de las vacaciones.